Afrontar la ausencia...

De camino a casa, intentaba pensar cómo sería entrar en la Calle Méndez Núñez, avistar la puerta de la Academia...Ha sido peor de lo que imaginaba...He intentado ser valiente...pero he fracasado...he entrado por la puerta y me he tenido que refugiar en el baño para esconder las lágrimas...Las caras de todos reflejaban dolor...Los más cercanos han tenido que seguir adelante, abrir, trabajar y afrontar que la vida sigue...como Pedro hubiera hecho, la academia tiene que seguir...
Frente al animado ambiente de los opositores, que nada sabían, estaba la cara de los que se estaban tragando una ausencia...Al doblar cualquier pasillo teníamos la impresión de que Pedro iba a aparecer diciendo: "Venga a clase que es la hora...que los alumnos os están esperando..."

Nos hemos quedado un poco huérfanos en la Academia...